Alpujarra de la Sierra pone en valor el camino real que unía Mecina Bombarón con Cádiar
Este municipio promociona las rutas, entre ellas las de las acequias, para atraer turismo de naturaleza en el Parque Protegido de Sierra Nevada
El Ayuntamiento de Alpujarra de la Sierra, presidido por el médico de familia en activo José Antonio Gómez, ha acondicionado el inicio del sendero y camino real que une Mecina Bombarón con Cádiar. En la entrada, por la parte de Mecina Bombarón, se ha construido un murete de piedra para proteger el camino y se ha instalado una baranda de hierro imitando a la madera realizada en el taller de Demetrio, de Cádiar. Próximamente se realizará la limpieza del camino que discurre por parajes históricos y muy pintorescos como, y por ejemplo, ‘El Alamillo’ y los ‘Pinos de Mellado’. El Ayuntamiento de Alpujarra de la Sierra instalará el resto de las señales en su término municipal que ya las tiene preparadas. La parte del término de Cádiar ya las tiene colocadas. Con este proyecto, José Antonio Gómez también pretende que la gente que pasea todos los días por la vera de la carretera para mantenerse en forma tome este sendero con más seguridad y si lo desea pueda salir a la altura del cruce del acceso del anejo de El Golco. Además, con este proyecto se beneficia el acceso a varias fincas agrícolas de particulares.
Deporte de naturaleza por el Parque Protegido de Sierra Nevada en el corazón de La Alpujarra. Las rutas por los caminos de las acequias árabes de Mecina Bombarón, puestas en marcha por el Ayuntamiento del municipio de Alpujarra de la Sierra, se han convertido en un recurso turístico y punto de destino de primer orden para los visitantes que buscan espacios naturales en los que caminar y contemplar el bello paisaje y las fincas de labranza, entre otras cosas.
Muchas rutas atraviesan castañares con multitud de ejemplares centenarios, algunos de troncos gigantescos. Caminar por las sendas de las acequias Ata y Baja de este municipio permiten contemplar en pocas horas las condiciones de vida en tiempos pasados y presentes así como un gran número de fincas y bancales escalonados y algunos cortijos.
Mecina Bombarón ha potenciado el turismo rural y otras iniciativas destinadas a la explotación de recursos y conocimientos rurales. Sus peculiaridades geográficas han sido factores para el desarrollo de una infraestructura turística que proporciona al senderista una oferta interesante de montañismo.
El patrimonio viario tradicional de su medio rural es utilizado incluso por grupos de extranjeros con el objeto de andar por los antiguos caminos de herradura que servían y siguen sirviendo de comunicación con otras zonas de La Alpujarra. En Mecina Bombarón son muchas las personas que siguen viviendo de la agricultura y la ganadería, existiendo también la figura del acequiero para el cuidado y la conservación de las acequias.
Aunque ya existían acequias de la época romana en La Alpujarra y otras zonas, la mayoría empezaron a construirse cuando comenzó la ocupación musulmana en la Península en el siglo VIII. Aquellas gentes importaron y desarrollaron en esta zona una tecnología sencilla pero eficaz para la gestión del agua que perdura hasta nuestros días. Son tres las acequias más características de Mecina Bombarón: careo, madre y brazal. Las acequias de careo tienen la finalidad de guiar el agua del deshielo desde las altas cumbres hasta caladeros donde se infiltra para crear humedales en los pastizales y para que vuelva a aflorar más abajo, originando una acequia de riego o para que sirva de abastecimiento de agua potable.
Las acequias madre son los canales principales que recogiendo el agua del río atienden normalmente a una franja altimétrica determinada de la ladera. De estas acequias salen distintos ramales o brazales para distribuir el agua a los distintos pagos, mientras que los regueros lo hacen es repartir el agua a cada parcela o bancal siguiendo las normas establecidas por la comunidad de regantes. El municipio de Alpujarra de la Sierra es uno de los lugares más interesantes de la comarca de La Alpujarra que ha sabido compaginar el turismo con la agricultura, la cultura, los libros, la poesía, el deporte, los museos, entre otras cosas. Este municipio merece la pena ser visitado a fondo y sin prisas. Su sierra es maravillosa. Desde hace años atrae a muchos turistas y senderistas de España y otros países. Su biblioteca municipal es una de las mejores de La Alpujarra. En Mecina Bombarón existe un puente romano para salvar el río y que en otros tiempos acogía el camino real Granada-Almería.