La industria del Jamón de Trevélez, en contra de la creación de la IGP del Jamón Serrano
Desde el Consejo Regulador sostienen que seguirán luchando en contra de la decisión del Ministerio de Agricultura
Llegar a Trevélez no es tarea fácil, aunque el visitante lo agradezca una vez allí. Ahora su industria, Jamón de Trevélez, tiene ante sí un tortuoso camino que no se han buscado, pero que tendrán que recorrer para conseguir defender lo que es suyo. El BOE publicó el pasado 12 de enero la resolución por la que «se adopta la decisión favorable relativa a la solicitud de anulación de la Especialidad Tradicional Garantizada «Jamón Serrano» y además «el registro comunitario de la Indicación Geográfica Protegida «Jamón Serrano».
¿Y esto qué implica? Pues que a partir de ahora todo aquel que quiera podrá producir «Jamón Serrano» donde quiera, no solo donde siempre se ha hecho por sus características especiales, como por ejemplo, la localidad de Trevélez. Una medida que podría ser entendida como una «oportunidad», según la Asociación Nacional de la Industria Cárnica, ANICE, que integra a más de 180 empresas, incluidas las más grandes de este país, con grandes presupuestos y mucha influencia en el sector agroalimentario.
Desde ANICE llevan batallando desde hace años por crear una Indicación Geográfica Protegida (IGP) que abarque el jamón que se elabora en toda España con el pretexto de que este es un producto ampliamente reconocido fuera de España como un alimento representativo de la gastronomía española. Esto, a pesar que el Jamón Serrano está amparado desde hace años por la figura Especialidad Tradicional Garantizada (ETG). Así, todo el jamón que se produzca en España podrá ser Jamón Serrano, da igual si ha sido curado en la localidad de Trevélez, Serón, o en una nave industrial de Murcia. Una medida que choca frontalmente con la industria del Jamón de Trevélez, formada por empresas que con su buen hacer han sabido llevar por el mundo el nombre de la localidad desde el siglo XIX. Fue Isabel II quien en 1862 ya otorgó un sello de calidad a los jamones de Trevélez que los hacía únicos.
Pilar Álvarez, presidenta del Consejo Regulador Jamón de Trevélez, asegura que esta medida «perjudica a Trevélez, pero también a todos los productos», al perder todos su identidad, considerándose todos Jamón Serrano. Los jamones de esta localidad están controlados por su Consejo Regulador mediante el precinto de color Negro, Rojo o Azul y que incluye un número único para cada pieza y son tratados con esmero por las diferentes empresas de la localidad. «Así en las zonas rurales nos comen los grandes, porque como el Jamón Serrano se podrá elaborar en otro sitio, al final se hará allí, y eso tira por el suelo la calidad del producto, eso no es una competencia leal. Nosotros no utilizamos conservantes, y con esta decisión podrán entrar jamones con aditivos curados en cualquier sitio», indica Pilar Álvarez.
En la batalla contra la decisión de que el Jamón Serrano se haga en cualquier parte de España está la Junta de Andalucía y la Diputación de Granada, además de los elaboradores de la ETG, como no podría ser de otra manera. Ahora tienen un mes para presentar un recurso contra esta medida, y aseguran que seguirán luchando «por nuestra calidad, por nuestra distinción, y esperamos que alguien nos escuche», asegura Pilar Álvarez.
Una batalla que se antoja convulsa y larga, pero que si se pierde será también un fracaso para el consumidor, que no tendrá en la mesa con la misma calidad del que disfruta actualmente. Mientras, en Trevélez, están decididos. «Vamos a utilizar todos los cartuchos, porque esto es la tradición de este sitio», subraya la presidenta del Consejo Regulador Jamón de Trevélez.
