Pampaneira recuerda su pasado morisco con la instalación de dos murales con ilustraciones
Son un homenaje a las mujeres como guardianas de la tradición y a la arquitectura que legaron los moriscos
Pampaneira, como ocurre en prácticamente todos los municipios de La Alpujarra, presume de tener una rica vida cultural e histórica. Con restos de importantes asentamientos medievales, esta localidad gozó de mucha riqueza e influencia en época nazarí, debido al comercio de la seda, hasta que tras la Rebelión de Las Alpujarras, que acabó con la expulsión de los moriscos, la zona fue repoblada con cristianos procedentes sobre todo de Castilla La Mancha.
Ahora, el Ayuntamiento de Pampaneira ha instalado dos murales con ilustraciones de su pasado morisco diseñados por la arqueóloga, topógrafa e ilustradora Esperanza Martín Hernández, y que además forman parte de la cubierta del libro colectivo De Nación Morisca, editado por Margarita M. Birriel Álvarez y Raúl Ruiz Álvarez.
Las ilustraciones muestran dos escenas. En primer lugar, quienes las observen podrán trasladarse a las calles del municipio en el siglo XVI y conocer la arquitectura singular del municipio. Además, se puede leer “La Alpujarra Morisca: moriscas y moriscos marcaron para siempre este territorio y nos legaron el paisaje cultural que nos hace únicos en el mundo”. En segundo lugar, podrán descubrir a las mujeres moriscas cultivando la seda en el interior de una casa de Pampaneira con la leyenda “Moriscas criando la seda. Hilar y tejer, criar y labrar…las mujeres de Pampaneira son las guardianas de nuestro legado cultural a través de los siglos”.
Realizados en cerámica, el alcalde del municipio alpujarreño, Ángel Pérez, ha explicado que “son un homenaje a las mujeres como guardianas de la tradición y a la arquitectura que nos legaron los moriscos y que es uno de nuestros símbolos más importantes”.
El proyecto “Legado morisco de Pampaneira” se concibió como parte de la conmemoración del 450 aniversario de la rebelión de las Alpujarras, organizada por el Centro de Estudios Históricos del Valle de Lecrín y La Alpujarra (CEHVAL) y en el que participaron numerosas entidades y colectivos.
“Con la instalación de estos murales iniciamos este proyecto que contará con más murales por el municipio que conformarán una ruta, y también con actividades culturales como la presentación en los próximos meses del libro de la editorial Universidad de Granada, Patrimonio, Cultura y Turismo. Claves para el desarrollo económico y demográfico de La Alpujarra, editado por María José Ortega y Raúl Ruiz”, ha detallado Pérez.
Una de las iniciativas de esta conmemoración fue la publicación de varios libros, entre los que se encuentra De Nación Morisca que reúne a una treintena de expertos de todo el mundo para reflexionar sobre los casi cien años que transcurren desde la conquista del Reino de Granada por los Reyes Católicos hasta la Rebelión Morisca, su derrota e inmediata expulsión del Reino por Felipe II y la subsiguiente repoblación.
Por su parte, el secretario del Centro de Estudios Históricos del Valle de Lecrín y La Alpujarra, Raúl Ruiz, ha manifestado que “la guerra de las Alpujarras y la posterior expulsión de la comunidad morisca del Reino de Granada marcaron para siempre a este territorio, y recordar la guerra nos ayuda a construir la paz basados en principios de respeto y multiculturalidad”. “Las gentes que habitaron La Alpujarra nos legaron un conocimiento en la agricultura, las infraestructuras hidráulicas, la artesanía o las técnicas constructivas que han llegado hasta nuestros días, mostrando una comarca de una belleza y un patrimonio inigualable”, ha apostillado. Asimismo, Ruiz ha anunciado que “La Universidad de Granada, la Diputación de Granada, el CEHVAL y el Ayuntamiento de Pampaneira, así como proyectos diversos proyectos de investigación están organizando un Congreso que será histórico para discutir sobre género y trabajo”. El Congreso, dirigido por Margarita M. Birriel, se celebrará en Pampaneira del 12 al 16 de septiembre en torno a una treintena de mesas de múltiples disciplinas. Un compromiso del CEHVAL con el territorio.