Los olivos centenarios de las Ánimas Benditas
Durante siglos el aceite que han producido varios olivos comunales del pueblo alpujarreño de Olías ha servido para iluminar la lamparilla dedicada a las Ánimas Benditas que se encuentra en la iglesia
En el recóndito pueblecito alpujarreño de Olías (anejo de Órgiva) se conservan varios olivos cuyo fruto convertido después en aceite ha servido durante siglos para alimentar la lamparilla dedicada a las Ánimas Benditas ubicada en la iglesia. Hasta hace unos lustros los mayordomos de las fiestas de Olías, en honor a la Virgen de Gracia, eran los encargados de recoger la aceituna de los dos olivos de las Ánimas Benditas. Esta tradición desapareció cuando casi toda la población de Olías emigró a otros lugares para poder prosperar.
Durante siglos se han utilizado en la ermita y en la mayoría de las casas de Olías las lamparillas de aceite de oliva como fuego sagrado. Las pequeñas lucecitas han invitado a la reflexión, la calma y la oración. Hay quien sostiene que su luz serena sirve para conectar con el mundo sutil. Según algunas personas a las Ánimas Benditas se les piden favores, la intermediación para solucionar un conflicto o su intercesión para alcanzar una sanación o solucionar un problema grave. Existen ermitas y gran devoción a las Ánimas Benditas en Caratáunas, Nieles, Bubión, La Taha, Juviles, Tímar, Lobras, Mecina Bombarón, Picena, Nechite, Turón, etcétera.
Existe la creencia de que las Ánimas Benditas, sobre todo aquellas que salieron del purgatorio, tienen una posición privilegiada y un cierto poder para ayudar a los vivos por estar más cerca del cielo y de Dios. Según algunas personas, las Ánimas Benditas son al mismo tiempo ambivalentes, es decir, pueden ser buenas o venir con malas intenciones. Unas pueden interceder por nosotros ante la divinidad o incluso pueden ayudarnos en nuestros males o problemas, pero también pueden venir a pedir justicia, venganza o a molestar y aterrorizar a los vivos.
Según el antropólogo Marcial Gondar “las Ánimas pueden venir a este mundo bajo distintos aspectos, bien como individuos o bien como grupo, en el caso de ‘La Compaña’. Cuando aparecen como individuos pueden hacerlo bajo la apariencia que tenían en vida, o en forma de animal, por ejemplo es muy habitual hacerlo como abeja o luciérnaga y existe la creencia en Galicia de que las mariposas nocturnas de color blanco que podemos ver en nuestras casas son Ánimas que salen del purgatorio y las negras son las Ánimas que vienen a pedir que les recen oraciones para ayudarlas en su salvación”.
“Las Ánimas –según Marcial Gondar- pueden venir también en forma de ruidos, sombras o luces y además pueden materializarse en algo inanimado como una piedra. Cuando estas se nos presentan pueden hacerlo de manera directa, como ocurre en las apariciones o cuando se introducen en el cuerpo de una persona. Contaban nuestros abuelos que si le decías una oración antes de dormirte y les pedías que te despertaran a una hora determinada te levantaban a la hora solicitada como si de un despertador invisible hubiese sonado, pero cuidado con no olvidar la oración por que si te dormías sin rezar, las Ánimas acudían a tirarte de los pies”, terminó diciendo.