La atractiva arquitectura vernácula de Mecina Bombarón

Esta localidad de La Alpujarra puede presumir de tener uno de los tinaos moriscos más largos y grandes de la comarca, soportado con vigas de castaño centenarias

En la localidad de Mecina Bombarón se conserva la arquitectura ancestral y tradicional de La Alpujarra. En este bello, turístico e histórico pueblo, entre otras muchas interesantes, existe un tinao morisco muy largo y grande en la Calle Santa Ana. Un vecino que vive cerca de este lugar llamado José Castillo Asenjo, de 87 años de edad, recuerda cuando era niño y durante el invierno se cobijaba con otros amiguitos en el tinao para que no les lloviera y poder jugar. El tinao como es muy largo lo comparten varias moradas. En otros tiempos desempeñó su trabajo en este lugar Eduardo ‘El Zapatero’. José Castillo desde pequeño se dedicó al campo. Nunca pisó la escuela. Hizo la mili en África. A los 22 contrajo matrimonio con Trinidad Salcedo y tuvieron nueve hembras y un varón que le han dado 24 nietos y 10 biznietos. Él reside en la Calle Arriaces. José se crió en otra casa cercana de la que tiene ahora y de vez en cuando recuerda sus vivencias cuando era pequeño en este típico tinao de Mecina Bombarón soportado por vigas de castaño.

Mecina Bombarón es un municipio maravilloso muy visitado por gente de dentro y fuera de España. Muchas viviendas de Mecina Bombarón se caracterizan por presentar una tipología alpujarreña con muchos siglos de historia. Son edificaciones de varias plantas donde la colocación de las crujías paralelas o perpendiculares a fachada, vienen condicionadas por la ubicación de la parcela en la trama urbana. Las antiguas casas están provistas de cuadra, leñera, granero, cocina, comedor y dormitorios, principalmente. Algunas dependencias de estas moradas centenarias se han suprimido. Antiguamente no existían aseos en las viviendas, utilizándose el corral como espacio de servicio. Eran otros tiempos.

La carpintería de las antiguas casas de Mecina Bombarón suele ser de madera de castaño. Algunas puertas con muchos años de historia suelen estar partidas horizontalmente, manteniéndose durante el día normalmente abierta la parte de arriba y cerrada la de abajo, lo que posibilita ventilación y control del acceso de pequeños animales a la vivienda. Los balcones antiguos suelen ser de proporción rectangular, aunque existen varios modelos, que le dan a la calle cierta variedad formal: balcones sin voladizo, sobre la calle, y enrasados con un paramento de fachada; todos ellos tienen la típica carpintería de castaño, con postigos. En Mecina Bombarón hubo excelentes carpinteros. Las barandillas suelen ser bastantes variadas, siendo las más comunes, las realizadas a base de herrería vertical.

En cuanto a los porches, existen de dos tipos: aquellos que constituyen un hueco arrebatado a la casa, el cual es el concepto más clásico de porche y los que además de servir de anexo a las viviendas se usan de calle de paso y tras el techo del mismo reposa parte de la casa. Las chimeneas constituyen unas formas muy importantes en el ambiente urbano generado por las casas. Suelen ser altas para superar las cotas razonables, debido a las pendientes. Quizás sea la chimenea el elemento arquitectónico que se muestra con menor pudor obedeciendo exclusivamente a criterios funcionales: cilindro de obra, salida de humo mediante tabiquillos de ladrillo que sostiene la tapadera.

Interiormente las antiguas viviendas de Mecina Bombarón se caracterizan por ser una arquitectura blanca; tanto las paredes como el techo (rollizo de madera, ripias de laja de pizarra) se blanquean periódicamente, de tal forma que las sucesivas capas de cal configuran una textura blanda muy agradable a la vista. Los suelos antiguamente estaban formados por lajas de pizarra y tierra. Las recientes construcciones intentan imitar la tipología de las viviendas tradicionales. En Mecina Bombarón se respetan también los tinaos y terraos de las casas.

Por sus condiciones geográficas e históricas, Mecina Bombarón es un filón cultural ramificado en vetas de gran pureza en el más amplio sentido antropológico. En la zona más antigua de este pueblo las casas están pegadas, ‘apretujadas’ las unas a las otras, en algunos casos, sin guardar alineación. Entre cada conjunto de ellas aparecen calles y plazoletas de trazado irregular separando los barrios. Las calles son blanqueadas con cal y ‘azulete’ sin que predomine la tonalidad azul. Las paredes de las antiguas viviendas son de un grosor de 60 a 80 centímetros, incluso las interiores, pues todas sirven para sujetar los techos planos denominados terraos. El terrao es también parte aprovechada de la casa.

Mecina Bombarón, Yegen, El Golco y la aldea de Montenegro forman el municipio de Alpujarra de la Sierra. Su alcalde es desde hace años el médico de familia José Antonio Gómez. En este municipio se respira arte y cultura por los cuatro costados. Los productos del campo son muy apreciados. Merece la pena conocer a fondo y sin prisas todos los encantos de este lugar. Su gastronomía es excelente y sus tradiciones y festejos gozan de gran fama.