Embutidos de altura en Busquístar

Los jamones y embutidos caseros de Busquístar se convierten en un elemento esencial de la oferta culinaria y turística del municipio alpujarreño situado a 1.100 metros de altitud

En la localidad alpujarreña de Busquístar existe una sola carnicería artesanal que se ha hecho famosa dentro y fuera de Andalucía gracias a la alta calidad de sus productos elaborados como antaño. El establecimiento, bautizado con el nombre de ‘El Molino’ por encontrarse donde estuvo ubicado hace muchos años un molino de aceite y después otro de grano, está perfumado con nutritivas colgaduras de jamones, paletillas, salchichones, chorizos (fresco y seco), salchichas, longanizas y lomos embuchados. Este establecimiento ha conseguido ser motivo de peregrinación para los buenos degustadores de chacinas. Parte de sus productos son enviados a importantes establecimientos de Andalucía, el País Vasco, Cataluña, Levante, Palma de Mallorca, entre otros lugares.

Desde hace más de tres décadas los hermanos Manuel y Antonio Alcaraz y la esposa de este último, María Gracia Ortega, elaboran con mucho cariño y esmero, paciencia artesanal y con las mejores materias primas, embutidos que asombran a los vecinos, turistas y visitantes. La calidad de los productos derivados del cerdo que ofrece esta familia le han merecido con derecho propio fama dentro y fuera de Busquístar. Las chacinas y embutidos de este lugar son autenticas delicias para el paladar que saben a tradición y que muestran una personalidad que las hacen únicas. En el inmueble de la ‘Chacinería el Molino’ existe también una tienda de comestibles que se puede visitar incluso los domingos por la mañana. Antes de que esta familia se hiciera cargo de la ‘Chacinería el Molino’, el comerció lo defendió estupendamente y durante bastantes años Antonio González (ya fallecido). El número de registro sanitario de esta chacinería es el 48.

A los hermanos Manuel y Antonio Alcaraz (encanto de personas) los enseñaron a elaborar chacinas caseras con recetas centenarias su propia madre, María Castellón. También aprendieron a realizar excelentes productos alimenticios con carne de cerdo y buenas especias al lado de su paisano Antonio González. ‘Chacinería el Molino’ se ha convertido progresivamente en un elemento esencial de la oferta culinaria y turística de Busquístar, un precioso municipio de La Alpujarra alta situado a 1.100 metros de altitud sobre el nivel del mar, que durante muchos años fue plasmado en lienzos de lino por el ya desaparecido y consagrado pintor granadino José Ortuño, hijo adoptivo de Busquistar. Merece la pena visitar este pueblo porque tiene mucho encanto.