El arzobispo de Granada administra el sacramento de la confirmación a 25 jóvenes en la parroquia de Órgiva

También un grupo de adultos ha recibido la imposición de las manos del santo crisma y la renovación del Espíritu Santo

El arzobispo de Granada, monseñor Francisco Javier Martínez, ha administrado el sacramento de la confirmación a 25 jóvenes (entre chicos y chicas) en una misa concelebrada en la parroquia de Nuestra Señora de la Expectación de Órgiva junto con los párrocos Manuel España y David Salcedo y el joven seminarista Javier. Varios monaguillos atendieron al servicio del altar. También recibieron el sacramento de la confirmación un grupo de adultos. Todos y todas recibieron la imposición de las manos del santo crisma y la renovación del Espíritu Santo recibido desde el bautismo. El multitudinario acto religioso se celebró con alegría y mucho respeto. Las personas que recibieron el sacramento después de un tiempo de preparación estuvieron acompañadas de sus padrinos, catequistas y familiares en la eucaristía. La impresionante iglesia de las dos torres de Órgiva, la primitiva fue edificada hace 477 años.

Durante la homilía el arzobispo de Granada resaltó la importancia de crecer en la amistad con Jesús como un aspecto clave del Sacramento de la Confirmación e insistió en la oración para reforzar esa amistad. Francisco Javier Martínez durante el sermón explicó a los presentes el significado y porqué algunas veces se despojaba en la misa de la mitra y se quedaba tan solo con el solideo en la cabeza. “Lo he explicado para que las personas que desconocen esta ceremonia de ponerse y quitarse el gorro durante la liturgia lo sepan desde ahora en adelante porque también es bueno saberlo”. El maravilloso coro de la parroquia de Órgiva, un tesoro inestimable, actuó en la liturgia. Al final, el arzobispo quiso fotografiarse a los pies del altar mayor (a pocos metros de la imagen del milagroso y muy venerado Santo Cristo de la Expiración, patrón de La Alpujarra) con las personas que recibieron la confirmación, sus padrinos, catequistas, familiares y religiosos. En la sacristía fue saludado y felicitado por mucha gente y por miembros de varias cofradías.

Francisco Javier Martínez Fernández nació en Madrid el 20 de diciembre de 1947. Cursó estudios eclesiásticos en el Seminario Diocesano de Madrid-Alcalá. Está licenciado en Teología Bíblica por la Universidad Pontificia de Comillas. Es master of arts por la Universidad Católica de América (Washington) donde en 1985 obtuvo el doctorado en Filosofía y Lenguas Semíticas. Francisco fue ordenado sacerdote el 3 de abril de 1972. Fue párroco de Casarrubuelos (Madrid), profesor en el Seminario Diocesano de Toledo, profesor ayudante en la Universidad Católica de América, profesor del Instituto Teológico de Madrid. A los 37 años fue nombrado obispo titular Voli y de auxiliar de Madrid. Fue obispo de Córdoba. El 15 de marzo de 2003 fue nombrado arzobispo de Granada. Una de las primeras cosas que hizo en esta bendita tierra fue una peregrinación a la parroquia de la milagrosa Virgen del Martirio (patrona de La Alpujarra) situada en Ugíjar. Antes de llegar a este importante municipio conoció otros. En la explanada de la ermita de la Virgen de Fátima de Montenegro (aldea del municipio de Alpujarra de la Sierra) ofició una misa concelebrada. Siempre que puede se acerca a esta comarca. Hace poco estuvo en la iglesia de Capileira con el párroco de León, Alfonso Aguilar.