Busquístar recupera la Hermandad de Ánimas y procesiona por primera vez a la Virgen del Carmen
A este acto religioso asistieron también el párroco de Órgiva y otros pueblos de La Alpujarra, David Salcedo, y el sacristán de la iglesia de Pórtugos, José Vicente Ruiz
El pasado sábado, día 26, en Busquístar se ha celebrado la eucaristía para recordar especialmente a los difuntos de este municipio de la alta Alpujarra. El coro de la iglesia cantó maravillosamente. Después se celebró la procesión por las calles del pueblo rezando el santo rosario por los difuntos con la imagen de la Virgen del Carmen. Acto seguido se veneró a las Ánimas Benditas del Purgatorio que están expuestas en el altar de la Virgen del Carmen y que son antiquísimas y han sido restauradas. La procesión de la imagen de la Virgen del Carmen se ha realizado por primera vez en este municipio de La Alpujarra y desde ahora en adelante será procesionada en su día. Mucha gente portó el escapulario de la Virgen del Carmen. Hubo reparto de luminarias. Dos monaguillos sirvieron al sacerdote en la celebración de la liturgia y en rezo del Santo Rosario.
Según el párroco de Busquístar, Trevélez, Pitres y Pórtugos, Rubén Ávila Arenas, “desde hace unos años tenemos la costumbre de ponerle a las Ánimas Benditas mariposas de aceite por los difuntos y para pedirles que lleguen al Cielo. Nosotros queremos recuperar esa celebración que tenía la antigua Hermandad de Ánimas de Busquístar, que era en torno al 30 de noviembre, en la cual se veneraba a las Ánimas y se recordaba a todos los difuntos del pueblo. Entonces, hemos querido recuperarla con motivo de la restauración para que siempre la hagamos en Busquístar. También, seguirá saliendo la procesión de la Virgen del Carmen y luego se venerarán a las Ánimas Benditas. A esta primera fiesta ha venido a acompañarnos el párroco de Órgiva y otros pueblos, David Salcedo, y el sacristán de la iglesia de Pórtugos, José Vicente Ruiz. También, aprovecho la ocasión para informar que el día 28 de diciembre tendremos un viaje a Alhama de Granada para ver su Belén monumental, sus dos iglesias y el convento de San Diego. Además se celebrará una convivencia fraterna de los pueblos de Trevélez, Pórtugos, Busquístar y Pitres, y algunos de Ugíjar, Válor, etcétera”, terminó diciendo.
En la parroquia de Busquístar los martes se realiza una misa de diario con catequesis para niños y adultos para seguir formando a la gente, y los sábados se celebra la misa dominical que da comienzo a las seis y media de la tarde. La iglesia de Busquístar se reinauguró en 2020, después de unas obras de restauración muy importantes. El recinto sagrado estuvo cerrado 5 años.
La iglesia de Busquístar fue restaurada por la Curia y con donaciones en metálico de los vecinos del pueblo. Debido al estado ruinoso que presentaba su cubierta fue clausurada durante un lustro. El Ayuntamiento, presidido por Joaquín Álvarez, se encargó de conceder la licencia de obras. Este recinto sagrado también sufría grietas en sus bóvedas. La actividad religiosa se realizó en el salón parroquial. Gracias a la Curia y al pueblo de Busquístar se ha salvaguardado el patrimonio religioso de este precioso municipio de La Alpujarra. La iglesia de Busquístar, según algunos estudiosos, fue construida probablemente en la primera mitad del siglo XVI. La iglesia es de planta rectangular, con nave, crucero sin desarrollar en los laterales y capilla mayor, cuadrada; cubiertas por bóvedas de medio cañón, con lunetos, cúpula de media naranja y armadura moderna, respectivamente.
Según Mónica Santiago Martín “la iglesia de Busquístar debió de construirse en el segundo tercio del siglo XVI y fue quemada en la Rebelión de los Moriscos, diciéndose misa en 1578-78 “en una de las antiguas casas que se está cayendo…, y que probablemente se trataría de una mezquita. A finales de la centuria se reedificó, haciendo en 1601 Luis de Barrionuevo las armaduras. En 1618 se mandó reparar la armadura, siendo Alonso López Zamudio el encargado de hacer la obra. En la primera mitad del siglo XVIII continuaron los problemas con la armadura y a finales del siglo necesitaba agrandarse. Es posible que la iglesia actual se levantara en la primera mitad del siglo XVIII, teniendo las mismas medidas en el reconocimiento de Fernando Bravo. No obstante, fue reparada a fondo en 1858 y de nuevo en 1863-1864, derribando la torre, bóvedas y tejados, y volviéndose a hacer”.