Mecina Bombarón celebrará las Fiestas de la Castaña, las Setas y los Disfraces el 29, 30 y 31 de este mes

La preciada madera del castaño y su fruto forman parte de la cultura ancestral y gastronomía en este y otros municipios de La Alpujarra alta

Los mayordomos y mayordomas de San Miguel, de la localidad alpujarreña de Mecina Bombarón se están preparando para celebrar a lo grande, después de la pandemia, la Fiesta de la Castaña, la Jornada de las Setas y la Fiesta de los Disfraces los próximos días 29, 30 y 31 de este mes de octubre. El Ayuntamiento de Alpujarra de la Sierra, presidido por el gran médico de familia José Antonio Gómez, colabora en estos eventos. Los carteles anunciadores han sido elaborados por la excelente pintora y empleada del Ayuntamiento, María Rodríguez. La presentación de estas fiestas ha tenido lugar en la Casa Consistorial por Eli Ferrer, Patricia Peña y José Antonio Murcia, pertenecientes junto a otras personas a la comisión de fiestas. Mecina Bombarón, Yegen, El Golco y la aldea de Montenegro pertenecen al municipio de Alpujarra de la Sierra.

El día 29, Fiesta de la Castaña, habrá desayuno con buñuelos caseros elaborados a partir de las cinco de la mañana, chocolate, café, bizcochos, etcétera. También habrá venta de buñuelos; ruta guiada a partir de las diez y media de la mañana por el Sendero de la Acequia de los Castaños Milenarios y Centenarios; degustación de migas con engañifa; bingo; actividades infantiles; sorteo de un viaje gracias a un empresario de la zona; tostonada de más de 300 kilos de castañas a partir de las nueve de la noche y velada musical en el Salón Cultural, uno de los más grandes de La Alpujarra. El día 30 habrá bingo; degustaciones de setas de temporada, caracoles en salsa, papas a lo pobre, tapeo alpujarreño,; feria del medio día y música. El día 31 se celebrará la Fiesta de Disfraces con premios para todos los infantiles que participen. Habrá también música y un premio al mejor disfraz de adulto. La marcha estará servida.

En la zona de La Alpujarra alta existen muchísimos castaños, algunos milenarios. Originario de Asia, el castaño fue introducido en Europa por los griegos. Después, los romanos siguieron cultivándolo a lo largo de todo su imperio. Los árabes también apreciaron mucho este fruto y la madera. Su uso culinario en la recóndita comarca de La Alpujarra nunca ha dejado de jugar cada otoño un papel importante en la gastronomía.

En Lanjarón, Cáñar, Soportújar, Barranco de Poqueira, Pórtugos, Pitres, Busquistar, Trevélez, Bérchules, Mecina Bombarón, Nechite, Nevada…, se crían excelentes castaños. En un ramillete de pueblos de La Alpujarra se suelen celebrar las fiestas de las castañas a finales de octubre y principios del mes de noviembre, coincidiendo con la celebración del Día de Todos los Santos. Una de las fiestas más importantes dedicadas al fruto castañero se celebra cada año en el precioso y hermoso pueblo de Mecina Bombarón.

En Mecina Bombarón comienzan muchos vecinos y visitantes el mes de noviembre, realizando rutas por donde hay castaños centenarios y milenarios. También consumen castañas crudas, cocidas o tostadas y bailan más que un tropo por la noche. En La Alpujarra se hacen muchas fiestas de este tipo. Todas son estupendas. Recolectar castañas es un plan perfecto en otoño. Este trabajo requiere paciencia, un buen calzado y unos buenos guantes para no pincharse cuando se extrae el fruto preso en el erizo. Para evitar que estallen las castañas cuando se cocinan hay que practicarle antes un pequeño corte en forma de cruz.

La castaña la preparan en algunos restaurantes de La Alpujarra de muchas maneras. El prestigioso cocinero del célebre restaurante ‘El Asador’ de Capileira, José Luís Rosillo, las hace muy bien, tal como las confeccionaban sus antepasados. Merece la pena visitar esta casa para conocer todo lo bueno que hay dentro. También la cocina francesa inmortalizó la exitosa fórmula del ‘marrón glaçé’, dulce de castaña confitado en azúcar y glaseado con sirope. Aseguran los entendidos que hubo un tiempo en que la castaña compitió con la patata en la dieta europea.

Cuentan que a Federico García Lorca le encantaba mucho contemplar los castañares de Lanjarón. Mientras su familia tomaba las curativas aguas minero-medicinales del Balneario, Federico se adentraba en el campo para verlos de cerca. Después le gustaba charlar con los campesinos en una era morisca, a la entrada del pueblo. Al ya desaparecido y recordado pintor José Ortuño le encantaba plasmar castaños en sus lienzos, unas veces vestidos de hojas verdes y cobrizas y, otras, desnudos. Algunas de las cotizadas obras de Ortuño se pueden contemplar en los salones del hotel Nuevo Malagueño de Pórtugos.

Un vecino de Mecina Bombarón, Juan Gabriel Valdearenas Asenjo, es un gran experto en tostar castañas en una gran sartén agujereada alimentada con leña. Juan Gabriel es capaz de lanzar por los aires más de diez kilos de castañas cuando se están tostando para que cambien de postura en la sartén y ninguna se cae al suelo. En Mecina Bombarón este fruto se puede acompañar con una o más de una copa de anís.