Los grafitis como reclamo turístico en La Alpujarra
Municipios como Lobras, Alpujarra de la Sierra, Soportújar y Bérchules han aprovechado sus paredes para convertirlas en puntos de interés turístico

Cualquier iniciativa que suponga un reclamo turístico, y más en zonas rurales como La Alpujarra con el problema añadido de la despoblación, sin duda es bienvenida. El uso del grafiti está consiguiendo darle vida y sentido a algunos espacios y rincones de la comarca que antes pasaban prácticamente desapercibidos al visitante e incluso al propio vecino.
Y es que no son pocos los municipios de la comarca que están promoviendo el uso del grafiti para darle vida y color a sus rincones. En Alpujarra de la Sierra, por ejemplo, se han pintado paredes haciendo alusión al proyecto ‘El Pueblo Libro’ y conmemorando a los libros cuya temática tienen que ver con el agua. En este municipio se ha ilustrado mediante grafitis la zona del Nacimiento inspirándose en el libro ‘Somos agua que piensa’, de Joaquín Araujo. Otro grafiti recuerda a ‘Cosecha de agua y tierra’, de Eugenio Gras, libro centrado en la agricultura y en los agricultores y campesinos actuales. El tercer libro es ‘Al Agua’ de Sam García, publicación que busca introducir a los niños y las niñas en las distintas percepciones sonoras del agua.

En otro municipio, en Bérchules se ha dejado huella sobre la famosa y exitosa fiesta de Nochevieja de agosto con un mural espectacular en una de las paredes del pueblo y donde se ha embellecido con los elementos típicos de la fiesta: el reparto de mantecados, las uvas o el reloj.

En Soportújar en varios rincones se ha resaltado el acertado proyecto turístico y económico del Embrujo con murales sobre todos los elementos que envuelven al mundo de las brujas. Y en Tímar, pequeño anejo de Lobras, se han dedicado varias paredes por un lado para homenajear a las tejedoras de jarapas de La Alpujarra y por otro lado inmortalizar la tradición de la producción de seda. Sobre este último mural el Ayuntamiento de Lobras añade que “en casi todas las casas de Lobras y Tímar se tenía una habitación para la cría de gusano de seda, gracias a la cantidad de moreras que tenían en sus huertos”.



Estas obras artísticas callejeras han sido realizadas, entre otros, por el grafitero profesional ejidense, Nauni Moreno López, quien está siendo uno de los encargados de ayudar con sus manos a “impulsar los pueblos de La Alpujarra para convertir esas paredes en puntos de interés artístico y que la gente vaya a visitar esos pueblos y de paso consuman y hagan vida en el pueblo”. Una gran iniciativa en la que llevan trabajando (los trabajos son encargados por los propios Ayuntamientos) casi una década. “La idea es proporcionar al viandante una historia para que vaya a los pueblos” concluye este artista de los grafitis. Sin duda, dar vida a las paredes para dar vida a los pueblos.